Y en el paseo marítimo de la playa del Bogatell, observo cada día personas que pedalean, andan y corren en traje deportivo. Se mueven arriba y abajo, a derecha y a izquierda. Parece que no quieren parar, no sea que les caiga algo encima, ¿qué puede ser? La verdad es que hay tanto que esquivar: horizontes laborales sin futuro, recortes sanitarios despiadados (no se te ocurra ponerte enfermo), restricciones educativas (¡ay! del niño que necesite ayudas para el aprendizaje), hipotecas asfixiantes, mesías que aseguran la solución de todos los problemas invocando una palabra, dictadores encubiertos por mayorías parlamentarias, mares de banderas alienantes,... Y en medio de este batiburrillo de gente que va y viene, he encontrado un poema de Kirmen Uribe escrito en el suelo del paseo marítimo, que es un canto a la playa: "No sé elegir entre el Mar y la Tierra. Vivo felizmente en la línea que los une. En esta cinta negra que mueve el viento"

